Reproduzco aquí el Xmas que he escrito a mis colegas en una empresa donde colaboro mucho, por si puede inspiraros también.

FELICES FIESTAS!

Querid@s amig@s,

he recibido el Xmas del CEO de Europa y me he mareado cuando he leído lo que hemos hecho junt@s en 2018: no imaginaba que pasar tanto tiempo en el Bar de enfrente fomentara tanto la eficiencia y la productividad 🙂

Este año he tenido el privilegio de conoceros mejor, sobre todo los que habéis impulsado las «cuentas de Embajadores» y me gustaría compartir lo que me habeis inspirado este primer año, donde he tenido que luchar con el CEO de Europa por un sitio en la mesa de la segunda planta («Cyborg» dice que ya somos como una vieja pareja de casados), siempre ocupada por álguien joven con cuyo talento no puedo competir.

Pido oficialmente asilo en alguna mesa que quiera acogerme en la segunda planta o lo mejor será ir buscandome un sitio en cada planta, para d¡simular un poco cuando me echeis.

¡Sois increíbles!

Llevo trabajando 33 años (sospecho que la edad media aquí es bastante más baja) he estado involucrado personalmente en la co-creación e inversión en centenares de Empresas. Puedo reconocer el talento como Tommaso una oportunidad de venta, porqué me dedico profesionalmente a ello y os garantizo que nunca antes había visto tanta concentración de talento por metro cuadrado.

He podido sorprenderme trabajando con algun@ que no conocía o reafirmar mi sensación de WOW con los de siempre: vosotr@s sois (de hecho) la única ventaja competitiva. 

Vosotr@s hacéis (toda) la diferencia con el resto de competidores.

No sé cuantos de vosotr@s sois concientes de la suerte que tenemos por poder competir en un entorno tan complejo, con clientes (y compañeros) tan exigentes, en proyectos (muchos muy chulos) con impacto real en la sociedad donde vivimos y viven nuestros seres queridos, al afectar todos los sectores vivos (banca, seguros, eléctricas, retail, …).

La lista de proyectos que habéis ejecutado en 2018 es para tatuarsela. Hay un montón de gente y no solo entre los competidores que os envidia muchísimo, que canbiaría su trabajo por el vuestro sin preguntar por el sueldo o los perks que recibís.

Os cuento esto porqué la experiencia te permite ver con cierta perspectiva: a veces cuando vives en el paraiso y no has vivido en otros, difícilmente puedes apreciarlo al máximo.

Mi abuela Gina, que había vivido dos guerras, un terremoto que dejó a su familia sin techo, un diagnóstico de 6 meses de vida por TBC con 33 años y dos niñas pequeñas a su cargo (luego vivió hasta los 92 años), me decía: «Antonio, para estar bien tienes que haber estado mal».

Seguramente hay cosas mejorables para hacer vuestra experiencia todavía más increíble, pero dejadme compartir desde la distancia, la honradez y mi experiencia vivida so far, porqué estoy tan feliz de formar parte de vuestra tribu, porqué sospecho que algunas de estas razones son escalables a vosotr@s.

(Por cierto: TODOS pensamos siempre que las empresas nos pagan poco, menos de lo que valemos, que nos deberían dar más cariño).

Los líderes que conozco, con el fundador al frente, son buenas personas, honestas, con valores de verdad.

He vivido una conversación reciente donde estabamos decididos en perder una cuenta importante si esto significaba que nuestra gente sufriera un trato improprio por parte de un cliente.

Si pensais que esta es la praxis en el resto de consultoras, necesitais un cambio de aire y probarlo en vuestras carnes, como la persona que ha valorado «1» sobre 10 su «satisfacción» con la fiesta de empresa del día 14, incluso antes de vivirla.

Estoy feliz aquí porqué tenemos proyectos muy divertidos entre manos, que hacen historia, que me permiten aprender siempre algo nuevo, trabajar con gente como vosotr@s, experimentar nuevas herramientas y tecnologías, hablar con los líderes de las empresas más grandes y de impacto, participar en eventos «mind blowing» como Innovators Under 35, Emtechs, los Hackatons/Datathons, los estudios, los bootcamps, las revistas, los espacios de Open/Crossed Innovation, etc.

Puedo proponer proyectos locos y nadie me mira con la expresión «¿que te has fumado hoy?», nadie me dice «huf, esto nosotr@s no lo hacemos, no sabemos».

Siempre hay emergencias con clientes exigentes, pero nunca álguien me ha puesto una mala cara porqué era un viernes, porqué era la hora de la comida o Navidad: de hecho el año pasado por estas fechas, a Tom se le ocurrió presentarnos a un proyectón muy grande.

¡Lo entiendo! El pobre estaba en Argentina, en una piscina al solecito y cuidando de una sobrina metida en un pato flotante! Se armó un equipo en seguida, entre Italia, Argentina, Cataluña, Madrid, Invernalia (!), …. y entre turrones y cotillones presentamos una obra de arte que hoy es una referencia, al menos en Europa.

Estoy feliz aquí y así les pasa a los 25 Embajadores que ya colaboran con la casa, porqué puedo soñar, me río mucho, percibo y respiro talento, competencia, ilusión y pasión, porqué me divierto la mayoría de las veces que piso vuestras oficinas, hoy con nuestro nombre bien visible pintado en el exterior, bien grande.

Honestamente no sé si a tod@s or tratan con el mismo respeto que dan mi edad y mis canas (de hecho tengo el pelo negro pintado de blanco y 38 años muy mal llevados) o si la confianza que tienen los líderes con vosotr@s les impide comunicar adecuadamente cuanto os admiran, pero animo a los que dudan, por el motivo que sea, que vengan a verme y a aquellos que quieren más caña, también.

Os necesitamos y que convezcais a vuestr@s amig@s más talentos@s para que se unan a nuestros retos.

Bueno, acabo.

Gracias públicas para el team que comparte mi día a día más de cerca y hacen posible todo lo que conseguimos.

¡GRACIAS!

Os deseo de corazón a tod@s las mejores Fiestas y que podamos celebrar juntos un nuevo año, una nueva oportunidad por hacer algo bueno, por impactar en álguien, por sentir las dos únicas emociones posibles al despertarnos cada mañana: agradecimiento y aplauso.

Mi «tarjeta de Navidad» de 2018 está sacada de un dibujo de «visual thinking» que una artista creó escuchando mi charla de clausura del Congreso CAS2018 de Alicante la semana pasada, «Innovando en personas» (que me impidió vivir la fiesta del 14 con vosotr@s).

¿Hay algo más importante que hacer feliz a las personas que queremos, respetar e inspirar a la gente que trabaja con nosotros, aprender, compartir, sentir, liderar, arriesgarse, fracasar y volver a intentarlo, amar incondicionalmente?

Os quiero regalar este video que el equipo de Exponential Sales ha seleccionado, donde se demuestra el poder de conectar con otr@s, para crear cosas increíbles.

AUGURONI